La flor que te ayuda a volver a tu rutina
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16 octubre, 2018Los problemas gastrointestinales son muy frecuentes hoy en día, y a menudo nos acompañan durante bastante tiempo por falta de diagnóstico; hinchazón, dolor abdominal agudo, náuseas o vómitos son a grandes rasgos, los síntomas más comunes. No encontrar el origen de estas molestias puede derivar en algunos casos a la sobre-medicación de la población o en problemas graves de salud.
Un ejemplo que pone de manifiesto lo anterior es la infección por la bacteria Helicobacter pylori. Aproximadamente, dos tercios de la población mundial alberga dicha bacteria y aunque en la mayoría de las personas no causa síntomas, hay un porcentaje significativo que puede desarrollar úlcera péptica estomacal o intestinal. En el peor de los casos esta úlcera puede acabar produciendo un cáncer estomacal o linfoma gástrico.
Pero, no nos equivoquemos, presentar todos estos síntomas no es sinónimo de estar infectados por la bacteria, hay más causas potenciales que los explican, como por ejemplo presentar intolerancia a ciertos alimentos.
Para diferenciar entre la intolerancia alimentaria y el Helicobacter pylori debemos preguntarnos si las molestias gastrointestinales disminuyen o desaparecen después de las comidas. Si el malestar empeora después de la comida, sospecharemos una intolerancia.
¿Qué es una intolerancia alimentaria?
Se habla de intolerancia alimentaria cuando el cuerpo no es capaz de digerir correctamente un alimento o alguno de sus componentes. Esto desencadena una reacción inflamatoria intestinal que separará progresivamente las células intestinales entre sí, dejando espacio entre ellas i dando lugar a molestias como la hinchazón, pesadez, rampas abdominales, acidez, malestar e incluso nauseas o vómitos. En casos más avanzados pueden producirse complicaciones tales como la mala absorción de vitaminas, alergias, picores o incluso migraña.
Por todo esto, es muy importante detectar cuales son los alimentos que nos provocan esta intolerancia, entre los más comunes se encuentran; leche de vaca, el huevo, los cereales… para posteriormente retirarlos de nuestra alimentación durante un tiempo y poder tratar adecuadamente el intestino. Si la intolerancia es leve o media, con el debido tratamiento y tiempo, los alimentos podrán irse introduciendo a la dieta sin generar ninguna molestia.
GI Natural, Bienestar digestivo
Este complemento alimenticio es ideal para el tratamiento intestinal de las intolerancias, contiene glutamina, enzimas, cofactores y cepas bacterianas de nuestra propia flora intestinal que nos ayudan a digerir mejor los alimentos, protegen las células del estrés oxidativo y contribuyen a desinflamar las células intestinales. Con tan solo tres comprimidos al día, y una dieta correcta que le proporciona el farmacéutico podrá decir adiós a esas molestias intestinales que tanto cuestan de ser eliminadas.
¡No dude en preguntar cualquier duda a nuestros farmacéuticos!